07.07.2018 19:24 h

VÍDEO: La loca celebración de los hinchas ingleses

Los hinchas ingleses no ocultaban su euforia por la primera clasificación de su selección para semifinales del Mundial en 28 años: las duchas de cerveza se sucedieron entre cánticos y festejos en los 'pubs' y calles del país.

En Flat Iron Square, un lugar que reúne varios bares y restaurantes al aire libre en el corazón de Londres, 650 personas habían desembolsado 10 libras (11,5 euros) para poder seguir juntos en ese lugar, ante una pantalla gigante, el partido ante Suecia (victoria inglesa 0-2) de este sábado.

La victoria desató la fiesta e hizo sonar con fuerza la estrofa de "Football's Coming Home" (El fútbol está volviendo a casa), de la canción "Three Lions" (Tres Leones), uno de los emblemas del equipo desde la Eurocopa que albergó en 1996.

La última clasificación de Inglaterra para las semifinales mundialistas se había dado en Italia-1990, cuando seis de los 23 jugadores del plantel actual ni siquiera habían nacido y Margaret Thatcher era la primera ministra.

En el inicio del partido de este sábado, el "God Save The Queen" (Dios Salve a la Reina), cantado por los aficionados londinenses con fervor, se acompañaba de abucheos al himno sueco. Después de un primer cuarto de hora sin goles ni gran fútbol, un primer tiro de Harry Kane desató algunos gritos. El tanto de cabeza de Harry Maguire, unos instantes más tarde, provocó gritos de alegría e hizo volar por los aires la cerveza, la bebida omnipresente en las mesas.

"El ambiente es genial", decía Tania Burnham, de 27 años. "Estoy cubierta de cerveza, pero no me molesta, porque vamos a ganar el torneo", dice a la AFP. "Estoy un poco ansiosa antes de la segunda parte. Vamos por delante, ojalá esto estuviera ya terminado", reconocía con muchos nervios.

"Después de mi primera ducha de cerveza en el primer gol, me ducharé de nuevo con cerveza hasta final de año si ganamos este Mundial", prometía dejándose llevar por la alegría Camilla Mosley, una londinense de 24 años.

Hizo falta menos de un cuarto de hora de la segunda parte para que Camilla se viera otra vez llena de cerveza, cuando Dele Alli firmó el segundo gol inglés, con el cual los aficionados se subieron a las mesas y empezaron a saltar. "¡Apoyaré a Inglaterra hasta la muerte!", cantaban entonces los aficionados.

Con el transcurrir del partido, los nervios se iban convirtiendo en celebración ya que el 2-0 parecía asegurar el pase a semifinales, como finalmente ocurrió. Crecidos al saberse vencedores, estos hinchas se permitían comentarios y bromas cuando aparecían en las imágenes de televisión aficionados suecos abatidos en las gradas del Samara Arena.

El pitido final marcó el inicio de una presumible larga tarde y noche de celebraciones, con "Football's Coming Home" sonando ya a todo volumen y siendo entonado por los aficionados, que están a apenas dos partidos de vivir el segundo título mundial de la historia de Inglaterra, el país inventor de este deporte.

afp/livefutbol